A pesar de que ya no
sea el mes ideal para beber una Quadrupel bastante especiada,
sobretodo con el calor que está haciendo estos días. Esta cerveza
nunca sienta mal, ya que por algo es el producto estrella de la
cervecera belga De Struise. Esta cerveza fue llamada Pannepot,
por que era así como se llamaba el barco (el que aparece en la
etiqueta) donde pescaban los antiguos pescadores belgas.
En el vaso en casi
negra, espesa, compacta y con una espuma beige no muy
abundante y poco duradera, sobretodo para tratarse del estilo que es.
Al olor destaca una gran cantidad de especias, ciruela
y café con un ligero toque alcohólico.
Al probarla descubres
su complejidad. La malta domina completamente al lúpulo, cosa
que no es difícil ya que este último ni se deja apreciar. Al igual
que en el olor están presentes las ciruelas y el café, sin embargo,
también están muy presentes toques acaramelados, afrutados y
achocolatados. Y por supuesto, la multitud de especias sigue
muy presente, convirtiéndola casi en una cerveza de Navidad.
Como la mayoría de las
Quadruppel belgas, es bastante alcohólica, 10% ABV
exactamente, sin embargo, a pesar de que se dejan apreciar el alcohól
no satura ni tapa los demás sabores. Debido a su alta graduación,
es recomendable comerla con algo, y en mi opinión un queso maduro o
un cerdo asado maridarían bien. Se recomienda beberla en una copa
trapense entre 10º y 12º.
Mi nota: Por muy dura
que sea la situación de los pescadores, cualquier cosa merece la
pena si después del trabajo puedes deleitarte con ella. 95/100
No hay comentarios:
Publicar un comentario